Riesgos del cigarro electrónico en personas con diabetes tipo 2

Jesús Spinola
CEO

Alerta sobre el uso del cigarrillo electrónico en personas con diabetes tipo 2: Conoce los riesgos

El cigarrillo electrónico, también conocido como e-cigarrillo o vapeador, es un dispositivo que permite inhalar nicotina y a veces sabores sin tener que fumar tabaco. 

A diferencia de los cigarrillos convencionales, el cigarrillo electrónico no produce humo, alquitrán ni monóxido de carbono, que son sustancias nocivas para la salud. 

Sin embargo, esto no significa que el cigarrillo electrónico sea inocuo o beneficioso, especialmente para las personas con diabetes tipo 2.

¿Qué es el cigarrillo electrónico y cómo funciona?

El cigarrillo electrónico es un aparato que consta de una batería, un atomizador y un depósito que contiene un líquido, llamado e-líquido o e-jugo. 

Al activar el dispositivo, el atomizador calienta el líquido y lo convierte en un vapor que se puede inhalar de forma similar al humo del tabaco. El líquido suele contener una mezcla de agua, propilenglicol, glicerina vegetal, aromatizantes y nicotina. La nicotina es la sustancia adictiva del tabaco y la responsable de muchos de sus efectos sobre el organismo.

Vínculo entre diabetes tipo 2 y el cigarrillo electrónico

La diabetes tipo 2 es una condición crónica que se caracteriza por un aumento del nivel de azúcar en la sangre debido a una resistencia o deficiencia de la insulina, la hormona encargada de regular el metabolismo de la glucosa. Esta condición puede tener complicaciones graves como enfermedades cardiovasculares, renales, nerviosas u oculares.

El uso del cigarrillo electrónico puede afectar al desarrollo y al control de la diabetes tipo 2 por varios mecanismos:

  • La nicotina puede aumentar la resistencia a la insulina, lo que dificulta el aprovechamiento de la glucosa por las células y eleva el nivel de azúcar en la sangre.
  • La nicotina puede estimular la liberación de adrenalina y cortisol, hormonas que también elevan el nivel de azúcar en la sangre y favorecen el estrés oxidativo y la inflamación.
  • El propilenglicol y la glicerina vegetal pueden alterar el equilibrio ácido-base del organismo y provocar una acidosis metabólica, una condición que puede empeorar el control glucémico y aumentar el riesgo de cetoacidosis diabética.
  • Los aromatizantes pueden contener sustancias químicas que pueden causar alergias, irritaciones o daños en las vías respiratorias, lo que puede afectar a la función pulmonar y a la oxigenación de los tejidos.
  • El vapor del cigarrillo electrónico puede contener metales pesados o sustancias cancerígenas que pueden dañar los órganos vitales o aumentar el riesgo de tumores.

Riesgos y complicaciones para personas con diabetes tipo 2

El uso del cigarrillo electrónico puede tener efectos adversos tanto a nivel local como sistémico para las personas con diabetes tipo 2. A nivel local, el cigarrillo electrónico puede provocar:

  • Sequedad e irritación de la boca y la garganta, lo que puede favorecer las infecciones bucales o dentales.
  • Tos, dificultad para respirar o sibilancias, lo que puede indicar una inflamación o una obstrucción de las vías respiratorias.
  • Dolor de cabeza, mareos o náuseas, lo que puede ser señal de una intoxicación por nicotina o por otras sustancias del vapor.
  • Quemaduras o lesiones en los labios, la lengua o las manos, lo que puede ocurrir por un mal uso o un mal funcionamiento del dispositivo.

A nivel sistémico, el cigarrillo electrónico puede provocar:

  • Hiperglucemia o hipoglucemia, lo que puede suceder por una alteración del metabolismo de la glucosa o por una interacción con los medicamentos antidiabéticos.
  • Hipertensión arterial o arritmias cardíacas, lo que puede ocurrir por una estimulación del sistema nervioso simpático o por una vasoconstricción de las arterias.
  • Aumento del riesgo de enfermedades cardiovasculares, como infarto de miocardio o accidente cerebrovascular, lo que puede deberse a una mayor formación de placas de ateroma o a una mayor tendencia a la trombosis.
  • Agravamiento de las complicaciones diabéticas, como neuropatía, nefropatía o retinopatía, lo que puede estar relacionado con un peor control glucémico o con un mayor daño oxidativo e inflamatorio.

Estudios y evidencia científica

Varios estudios científicos han demostrado los efectos nocivos del cigarrillo electrónico para las personas con diabetes tipo 2. Algunos de estos efectos son:

  • Empeoramiento de la resistencia a la insulina y aumento del nivel de azúcar en la sangre, lo que puede favorecer el desarrollo de la aterosclerosis.
  • Aumento del riesgo de infarto de miocardio, enfermedad coronaria y depresión, lo que puede indicar un deterioro de la salud cardiovascular y mental.
  • Alteración del funcionamiento del sistema nervioso autónomo y aumento del estrés cardiovascular, lo que puede manifestarse como hipertensión arterial o arritmias cardíacas.

Estos estudios se basan en el análisis de diversos parámetros biológicos, como el nivel de glucosa en ayunas, la movilización de células endoteliales progenitoras, la presión arterial sistólica y diastólica o la variabilidad de la frecuencia cardíaca. Estos parámetros reflejan el estado de salud de los vasos sanguíneos, el corazón y el cerebro.

Recomendaciones y consejos para evitar el uso en personas con diabetes tipo 2

Ante los riesgos y las complicaciones que puede tener el uso del cigarrillo electrónico para las personas con diabetes tipo 2, lo más recomendable es evitar su consumo y buscar alternativas más seguras y saludables. Algunas recomendaciones y consejos son:

  • Consulta con tu médico o tu educador en diabetes sobre las opciones disponibles para dejar de fumar o reducir el consumo de nicotina. Existen tratamientos farmacológicos, como parches, chicles o pastillas, que pueden ayudarte a controlar los síntomas de abstinencia sin exponerte a los efectos nocivos del cigarrillo electrónico.
  • Busca apoyo psicológico o emocional para afrontar el proceso de dejar de fumar o reducir el consumo de nicotina. 
  • Adopta hábitos de vida saludables que te ayuden a mejorar tu salud física y mental. Practica ejercicio físico moderado y adaptado a tus condiciones, sigue una alimentación equilibrada y variada, descansa lo suficiente y evita el estrés.
  • Evita los factores desencadenantes que te puedan provocar ganas de fumar o vapear. Identifica las situaciones, lugares o personas que te inciten al consumo de nicotina y trata de evitarlas o sustituirlas por otras más positivas. Por ejemplo, si sueles fumar después de comer, puedes cambiar ese hábito por otro como cepillarte los dientes, beber agua o masticar un chicle sin azúcar.

En resumen…

El cigarrillo electrónico es un dispositivo que permite inhalar nicotina sin tener que fumar tabaco, pero esto no implica que sea inocuo o beneficioso para la salud, especialmente para las personas con diabetes tipo 2.

Por lo tanto, se recomienda evitar su consumo y buscar alternativas más seguras y saludables para dejar de fumar o reducir el consumo de nicotina.

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